Las biografías nos permiten dar cuenta, a modo de zoom, de detalles en las vidas de las personas de nuestro interés. Este acercamiento puede ser narrado para un momento específico del transcurso de la vida de una persona, o bien, puede relatar por completo la historia de su vida. También el narrador puede ser la misma persona relatándose a si misma. O bien, la narración puede desarrollarse como una novela. Las experiencias íntimas plasmadas ligadas a los contextos sociales son la esencia de las biografías. El siguiente listado ofrece un abanico que muestra la pluralidad de circunstancias y personajes, cuyos relatos y retratos parecen superar los artificios de la ficción.
Philip Roth. La biografía
Blake Bailey
Realizada por el biógrafo de John Cheever (además de premio de la Academia Estadounidense de las Artes y las Letras y galardonado con el National Book Critics Circle Award), Philip Roth. La biografía (Debate, 2022), relata -por encargo del mismo Philip (1933–2018)- la biografía de uno de los autores más populares y oscuros de la literatura norteamericana contemporánea. Basada en análisis de archivos personales y entrevistas a amigos, amantes y colegas del autor, esta biografía de 800 páginas ha sido aclamada por medios especializados como The Washington Post o Kirkus. “Roth fue uno de los últimos representantes de una generación de novelistas heroicamente ambiciosos que incluía a amigos y a rivales ocasionales como John Updike, Don DeLillo y William Styron… y cabría afirmar que su obra es la que tiene las mayores posibilidades de perdurar. En 2006, The New York Times Book Review sondeó la opinión de unos doscientos «escritores, críticos, editores y otros expertos en literatura» y les pidió que identificaran «la mejor obra americana de ficción publicada en los últimos veinticinco años». Seis de los veintidós libros seleccionados para elaborar la lista final habían sido escritos por Roth: La contravida, Operación Shylock, El teatro de Sabbath, Pastoral americana, La mancha humana y La conjura contra América.”
Alejandra Pizarnik. Biografía de un mito
Cristina Piña, Patricia Venti
Venti, doctorada en Pizarnik, y Piña, quien tiene en su haber un libro biográfico de la autora, componen –a partir del descubrimiento de archivos personales de Pizarnik en la Universidad de Princeton- la biografía definitiva (Lumen, 2021) de una de las poetas más queridas en la actualidad cuyo halo de fatalidad -cincuenta pastillas de Seconal sódico- sigue permeando a generaciones. Escribía Julio Cortázar a la Alejandra ausente: “Vos, ¿te das realmente cuenta de todo lo que me escribís? Sí, desde luego te das cuenta, y sin embargo no te acepto así, no te quiero así, yo te quiero viva, burra, y date cuenta que te estoy hablando del lenguaje mismo del cariño y la confianza -y todo eso, carajo, está del lado de la vida y no de la muerte. Quiero otra carta tuya, pronto, una carta tuya. (...) El poder poético es tuyo, lo sabés, lo sabemos todos los que te leemos; y ya no vivimos los tiempos en que ese poder era el antagonista frente a la vida, y esta el verdugo del poeta (...). Solo te acepto viva, solo te quiero Alejandra.”
Elena Garro: Los recuerdos sin porvenir
Laura Ramos
Como complemento a Memorias (Debolsillo, 2019) de Helena Paz Garro, Debo olvidar que existí (Debate, 2017) de Rafael Cabrera o Yo, Elena Garro (Lumen, 2007) de Carlos Landeros, Elena Garro: Los recuerdos sin porvenir (Aguilar, 2023) de la editora y escritora Laura Ramos, es un documento importante que revela los últimos años de vida de Elena Garro y su hija Laura Helena. En 17 capítulos, introducidos con citas de Dostoievski a quien Elena admiraba y compartía con él una fe cristiana, Laura recorre la vida de Elena junto a su hija Laura Helena bajo la subyugante figura de Octavio Paz, con quien estuvo casada 20 años. Como un verdadero acertijo, Los recuerdos sin porvenir intenta mostrar las claves que marcaron el destino de la autora y su carrera literaria al desconocimiento gubernamental y de la escena intelectual mexicana por más de 20 años, duración de su exilio en España y Francia donde madre e hija llegaron a mendigar. Algunas de las claves:
- El asilo que Elena ofreció en su casa por los años sesenta a los dirigentes campesinos César del Ángel y Rubén Jaramillo.
- La relación íntima de Elena con Fernando Gutiérrez Barrios, entonces agente de la CIA y director de la Dirección Federal de Seguridad. Curiosamente ayudó a Fidel Castro y al Che Guevara a partir a Cuba desde Tuxpan (Veracruz) en 1953; años después sería Subsecretario de Gobernación, director general de Caminos y Puentes y gobernador de Veracruz. Éste se retiraría de las filas del PRI hasta 1993, año en que Elena y su hija regresan a México para ver conmemorada y reeditada su obra junto a la publicación de títulos inéditos.
- La intención de Elena de formar el Partido Patria Nueva al lado del priista Carlos Madrazo.
- La carta antimarxista que Laura Helena escribió en contra de su padre y de otros intelectuales mexicanos (como Barros Sierra, Luis Villoro, Leopoldo Zea, Carlos Fuentes o Rosario Castellanos) días después de la matanza del 68 y que fue publicada por El Universal como folleto anexo con 30 mil ejemplares.
Éramos unos niños
Patti Smith
De manera entrañable, la autora del clásico de culto “Horses”, nos relata en Éramos unos niños (Debolsillo, 2019) -Premio National Book Award del 2010- la profunda y dolorosa relación amorosa que mantuvo con el fotógrafo Robert Mapplethorpe en la Nueva York de los años 70 y 80. Así, en esta autobiografía conocemos a detalle las influencias y motivaciones artísticas de Patti y Robert a la par de sus vaivenes de supervivencia cuajados entre valentía, amor, inspiración y creatividad lúdica que acompañaron a Robert hasta el final de su vida en 1989. “… Otros días visitábamos museos de arte. Como solo teníamos dinero para pagar una entrada, uno de los dos veía el museo e informaba al otro. En una de aquellas ocasiones, fuimos al museo Whitney del Upper East Side, que era relativamente nuevo. Me tocaba a mí entrar sin él y lo hice a regañadientes. Ya no me acuerdo de las obras, pero sí recuerdo que miré por una de las singulares ventanas trapezoidales del museo y vi a Robert en la acera de enfrente, apoyado en un parquímetro, fumando un cigarrillo. Él me esperó y, cuando nos dirigíamos al metro, dijo: Un día entraremos juntos y la obra será nuestra.”
Hildegarda
Anne Lise Mastrand-Jorgensen
Hildegarda (Lumen, 2021) se propone desde la ficción literaria como un retrato psicológico y reconstrucción histórica de la monja prodigio del siglo XII de Europa, Hildegarda de Bingen. 50, de los 81 años de vida, son relatados en Hildegarda para detallar su ingreso al monasterio de Disibodenberg durante su niñez hasta la validación del Papa sobre las visiones divinas que la poeta, compositora, bióloga, mística, divulgadora del orgasmo femenino e inventora de la medicina natural y la cerveza, tal como hoy se fabrica, tuvo a lo largo de su vida.
“Hablan de ti, Hildegarda, desde Schmie hasta Disibodenberg. Dicen que solo con posar tus manos sobre ellos, los enfermos se curan. Dicen que eres la elegida de Dios, y que la tierra se ilumina bajo tus pies. Dicen que puedes ver el futuro y predecir la muerte.”
El invencible verano de Liliana
Cristina Rivera Garza
31 años atrás la hermana menor de la autora fue asesinada por su exnovio. A través de documentos y archivos personales, familiares, periodísticos y judiciales que Liliana dejó -directa e indirectamente- Cristina Rivera Garza realiza el relato de la vida interrumpida de su hermana, cuenta su íntima relación con ella, denuncia un caso más de feminicidio producto de la violencia machista de pareja y manifiesta con una prosa casi poética que: “… buscar, fabricar, encontrar, producir una relación con el lenguaje a través de la cual podamos narrarnos a nosotros más allá, en contra incluso, de las historias autorizadas desde el poder en turno, sinceramente me parece que eso es escribir”. Una playlist en de Langosta Literaria acompaña la lectura de la novela.
En este año El invencible verano de Liliana mereció el premio Pulitzer, a la fecha sigue como una denuncia en tono literario: “El 16 de julio de 1990, Liliana Rivera Garza, mi hermana, fue víctima de un feminicidio. Era una muchacha de 20 años, estudiante de arquitectura. Tenía años tratando de terminar su relación con un novio de la preparatoria que insistía en no dejarla ir. La decisión de él fue que ella no tendría una vida sin él. El invencible verano de Liliana es una excavación en la vida de una mujer brillante y audaz que careció, como nosotros mismos, del lenguaje necesario para identificar, denunciar y luchar contra la violencia sexista y el terrorismo de pareja. Este libro es para celebrar su paso por la tierra y para decirle que, claro que sí, al patriarcado lo vamos a tirar.»
The beautiful ones
Prince
Tres meses antes de su inesperada muerte, Prince había encargado al editor Dan Piepenbring ayudarlo con la escritura de sus memorias. Tenía que funcionar como si fuera su autobiografía y a su vez el libro de música más importante de todos los tiempos. Y así, The beautiful ones (Reservoir Books, 2016) cuenta la historia de cómo Prince se convirtió en Prince, con la reunión de un álbum biográfico de fotos, una carta de amor a sus padres, una sinopsis escrita a mano que había realizado para la película Purple Rain y testimonios recogidos de la prensa.
“Si quiero que este libro trate de un asunto fundamental, es la libertad. Y sobre la libertad de crear de forma autónoma. Sin que nadie te diga lo que hay que hacer, o cómo o por qué. Nuestra consciencia está programada. Vemos las cosas de cierta manera cuando somos jóvenes, estamos programados para seguir haciéndolas así. Entonces tienes que pasarte la edad adulta aprendiendo a superarlo, a leer los programas. Intenta crear. quiero decirle a la gente que sea creativa. Simplemente, empieza creándote el día. Y luego crea tu vida”.
El rock de la cárcel
José Agustín
Publicada a mediados de los ochenta, Debolsillo editó en el 2022 -acompañada del prólogo de Julián Herbert, el cuál puedes leer por completo en el sitio de Lengua, revista oficial de Penguin- la autobiografía de José Agustín, a quien recordamos con estima a unos meses de su fallecimiento. Organizada de manera breve en tres partes, el precursor de La Onda, nos cuenta sobre su infancia, adolescencia y temprana adultez en Quién soy, dónde estoy, qué me dieron, de Tienes que entrar para salir somos testigos de -cito a Herbert- “el debraye, el desdoblamiento en identidades, el espejeo amoroso y erótico” que comprendió su despegue profesional como escritor y en el tercer capítulo, "El rock de la cárcel", encontramos el traumático paso del autor por la cárcel de Lecumberri.
“Nunca creí que la mariguana o los alucinógenos fueran panaceas de algún tipo. Eran un vehículo. Yo los experimenté como medio de exploración de áreas desconocidas de mí mismo: un autoanálisis, con todos los riesgos que implicaba. Era evidente que de todas esas drogas la mariguana era la menos importante, y por tanto quizá la más peligrosa; yo me había aficionado a fumarla como tantos otros en esa época, pero nunca decreció mi capacidad de trabajo, mi creatividad, mi participación constructiva en la sociedad. Me parecía grotesco que fumarla pudiese llevar a la cárcel. Mis errores en Ya sé quién eres no se debieron a los alucinógenos sino a una extrema confusión, a la horrenda desprogramación que causó mi forma inmadura de tronar con mi esposa y con Angélica María. Por eso, y por regarla en mi película merecía ir a la cárcel, no por fumar mariguana.”
El niño es el maestro. Vida de María Montessori
Cristina De Stefano
“Al principio hay una niña. Está encerrada en una gran aula de techos demasiado altos. Estamos en 1876, y la escuela elemental pública de la via San Nicola de Tolentino, en Roma, es como las demás escuelas del Reino de Italia: una cárcel para niños. Hay que permanecer inmóvil en los bancos, escuchar a la maestra durante horas, repetir la lección a coro. Si uno se porta mal, lo castigan. La niña tiene seis años y odia todo eso desde el primer día. En silencio, comienza su revolución personal contra la institución. Una especie de huelga de atención, que en pocos meses la lleva a ser la última de la clase. «En el colegio no estudiaba nada —dirá ya de adulta—. Apenas escuchaba a las maestras, y a la hora de clase organizaba juegos, comedias.» Y continúa: «No entendía las operaciones aritméticas y durante mucho tiempo di los resultados con cifras inventadas, las primeras que se me ocurrían».”
La periodista italiana Cristina de Stefano dedicó cinco años a investigar la vida de la doctora, pedagoga y filósofa italiana que dejó un legado innegable en la educación actual. En El niño es el maestro. Vida de María Montessori (Lumen, 2020) podemos ser testigos de las circunstancias que originaron cambios revolucionarios en el campo pedagógico: dejar a los niños trabajar por sí mismos, con su propio ritmo, evitar notas que sugieran la idea de recompensa y castigo, la idea de competición y poca intervención del adulto para no interferir con el proceso cognitivo.
El código de la vida
Walter Isaacson
Walter Isaacson – biógrafo de Steve Jobs, Albert Einstein y Leonardo da Vinci- relata en El Código de la Vida. Jennifer Doudna, la edición genética y el futuro de la especie humana (Debate, 2021), la investigación que hizo alrededor de la técnica de edición genética “CRISPR/Cas9” que como una tijera corta secuencias genómicas de los organismos permitiendo así realizar cambios específicos en el ADN. En su aplicación este método posibilita, por ejemplo, desde encontrar virus y cortarlos en pedazos, hasta el diseño de bebés sanos, libres de posibles enfermedades mortales, hereditarias o adquiridas. El desarrollo de esta herramienta le valió a Jennifer Doudna y su colaboradora Emmanuelle Charpentier el Premio Nobel de Química del 2020 frente a los albores del COVID.
Walter recupera así la biografía de Jennifer para seguir el curso de esta revolución tecnológica cuyas implicaciones resultan inquietantes entre la proclamación del secretario general de la Academia Sueca – “El premio de este año abre la posibilidad de reescribir el código de la vida. Estas tijeras genéticas han llevado a las ciencias de la vida a entrar en una nueva época”- y las preocupaciones del mismo Walter: “…supe hasta qué punto la promesa de las CRISPR podría constituir también su peligro. A la naturaleza le llevó millones de años ensamblar tres mil millones de pares de bases de ADN de un modo complejo y ocasionalmente imperfecto con el que permitir la formidable diversidad que hay en nuestra especie. ¿De verdad podemos venir ahora y editar ese genoma para eliminar lo que consideramos imperfecciones? ¿Perderemos nuestra diversidad? ¿Nuestra humildad y empatía?”.