folder Publicado en Listado literario
Jóvenes y salvajes
Diana Sánchez comment 0 Comentarios

La mayoría de la gente coincide en que es la mejor etapa de la vida: eres joven, te quieres comer el mundo, conocer nuevas personas, explorar nuevos lugares; la edad perfecta para experimentar, echar a perder, volver a experimentar, volver a echar a perder y repetir el ciclo.

De acuerdo con la ONU, las personas jóvenes tienen entre 15 y 24 años. “KHÉÉ??, ¿Me estás diciendo que ya no soy joven si tengo 25?” Así es, a los 25 entras en la categoría de “adulto joven”. Es decir, todavía no eres viejo, pero ahora, según lo que dicta la sociedad, tienes la responsabilidad de mantenerte por tu cuenta y comienzas a tener achaques, a dormir a una hora razonable y preferir quedarte en casa un viernes por la noche.

Tal vez por eso, porque cuando entras en la adultez la vida se vuelve más real, más monótona y más aburrida, no se han escrito tantos libros sobre esta etapa. Lo que sí es que tenemos muchos y bastantes sobre la que hablábamos al principio: la juventud. Esa etapa de crecimiento, descubrimiento y experimentación, el paso de la niñez a la madurez; el género llamado bildungsroman o coming-of-age en la literatura. Es por ello que aquí te presentamos algunos títulos que consideramos imprescindibles, ya porque son clásicos, ya porque plasman diferentes perspectivas.

Los detectives salvajes

Publicada en 1988, esta novela de Roberto Bolaño plasma el estilo de vida de los jóvenes en la Ciudad de México al final de la década de los 70, quienes tomaban café con leche en cafeterías locales antes de que Starbucks irrumpiera con su globalización. A través de Juan García Madero, un adolescente de 17 años, y los poetas Arturo Belano y Ulises Lima (quienes fundan el movimiento literario real visceralismo), Bolaño muestra la vida nocturna, el desenfreno, la sexualidad y el pensamiento de la época. En los tiempos actuales, los personajes serían hombres que te dicen “Amiga, eres arte”.

Las ventajas de ser invisible

De los años 70, pasamos a finales de los 90 con esta novela de Stephen Chbosky, que sigue la vida de Charlie, un adolescente solitario e introvertido que, por gracia divina, conoce a personas geniales, pero igual de inadaptadas, en su último año de preparatoria. Este grupo, los invisibles, los cuadros de la pared, le ayuda a descubrir el mundo y a autodescubrirse, aunque ello implique darse cuenta.

El rumor del oleaje

Quedamos en que plasmaríamos diferentes perspectivas. Por eso incluimos El rumor del oleaje en esta lista. Puede que parezca algo anticuado para nuestros tiempos, pero justo esa era la intención de Yukio Mishima. Esta novela, ambientada en una isla japonesa apartada de la sociedad y del avance tecnológico que llegó tras la Segunda Guerra Mundial, es protagonizada por Shinji, un joven pobre que se enamora de Hatsue, la hija del hombre más rico de la isla. Para su fortuna (e infortuna también), ella le corresponde y surge un amor imposible entre ellos.

Con una prosa muy introspectiva y tranquila, como el oleaje cuando la marea es baja, Mishima nos muestra la intensidad del primer amor, pero también que éste no es suficiente para permanecer juntos. Al fin y al cabo, ¿quién vive feliz para siempre con su primer amor?

Mujercitas

Del Japón de la posguerra pasamos al Estados Unidos en plena Guerra Civil. Este clásico, escrito por Louisa May Alcott y un tanto autobiográfico, muestra el desarrollo de cinco hermanas, muy diferentes entre ellas, con un padre ausente y una madre como único sostén económico. La protagonista, Jo, sueña con convertirse en escritora para ayudar a su familia, pero para ello debe decidir entre seguir la vida que le dicta la sociedad (casarse, tener hijos, ser ama de casa) y su libertad con el “riesgo” de quedarse sola.

Publicada en 1869, Mujercitas es considerada una de las primeras obras feministas, y también uno de los primeros libros de bildungsroman sobre mujeres, pues el género era considerado, como casi todo en este mundo, como algo principalmente masculino.

El retrato de Dorian Gray

Ya dijimos que es la mejor etapa de la vida. Entonces, ¿por qué no buscar prolongarla? Eso es lo que hace Dorian Gray, el protagonista de esta novela escrita por Oscar Wilde. Gray se niega a envejecer, pero no sólo en un sentido mental como los chavorrucos de ahora, sino también físico. Para ello, conserva un retrato que hace el trabajo por él, pero conforme el tiempo avanza la situación se va complicando y su secreto corre el riesgo de ser descubierto. Con esta novela, Wilde explora ese pensamiento que ha invadido a la humanidad desde hace mucho tiempo: ¿cómo podemos extender la juventud? ¿Qué pasaría si pudiéramos ser jóvenes por siempre?

bildungsroman El retrato de Dorian Gray jóvenes juventud Las ventajas de ser invisible libros sobre juventud Los detectives salvajes Louisa May Alcott Mujercitas novela Oscar Wilde Roberto Bolaño

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Cancelar Publicar el comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.