¿Otra vez lunes? Sí, otra vez el día en que todo regresa a su cotidianidad, después de un fin de semana que apenas parecíamos disfrutar. El día que no a todos agrada y que quizás algunos quisieran borrar del calendario. ¿Verdad? Pues hoy es lunes, pero no cualquier lunes, es el Blue Monday, o lo que es lo mismo, el “día más triste del año”.
De acuerdo con el Dr. Cliff Arnall de la Universidad de Cardiff, sucede el tercer lunes del mes de enero debido a la tristeza que puede ocasionar la cuesta de enero, el salario insuficiente, el clima frío, el término de las fiestas decembrinas y el ver que no se podrán cumplir todos los propósitos del año. Si bien esta teoría no tiene un fundamento científico, aquí te dejamos algunos libros que podrás disfrutar en un día triste, pues la tristeza también es parte de la vida.
- Cometas en el cielo de Khaled Hosseini
La historia de Amir, un niño de doce años que se propone ganar la competición anual de cometas de la forma que sea, incluso a costa de su amistad con Hassan, un hazara de clase inferior que ha sido su sirviente y compañero de juegos desde la infancia. Una novela con un Afganistán como telón de fondo sobre dos padres y dos hijos, de su amistad y de cómo la casualidad puede marcar un hito inesperado en nuestro destino.
2. El niño con el pijama de rayas de John Boyne
Una historia conmovedora en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, donde Bruno, un niño de nueve años, se muda con su familia a una casa junto a una cerca, en Auschwitz. Ahí, al otro lado de la cerca conocerá a Shmuel que, como otras personas en ese lugar, viste un "pijama de rayas". Una historia que no dejará indiferente a nadie, y que también pueden leer niños a partir de los trece años.
3. Almas grises de Philipe Claudel
En diciembre de 1917, en un pequeño pueblo de Francia, el cuerpo sin vida de una hermosa niña aparece flotando en el canal. Este asesinato suscitará innumerables sospechas y despertará viejos rencores que sacudirán un orden social que se tambalea. La crónica de los hechos, escrita por un policía veinte años después del suceso, te invitará a descubrir una realidad inesperada. El gris es el tono dominante, pero no el gris de la muerte, ni el del duro clima invernal, ni siquiera el de la cobardía, sino el gris en que se desenvuelve la condición humana.
4. Noches azules de Joan Didion
Un libro autobiográfico lleno de dolor y de belleza donde Joan Didion habla sobre la muerte de su hija. ¿Qué mejor que las palabras de la autora para contarte de qué va el libro?
Durante las noches azules uno piensa que el día no se va a acabar nunca. A medida que las noches azules se acercan a su fin (y lo hacen, lo hacen siempre), uno experimenta un escalofrío literal, una visión de enfermedad, en el mismo momento de darse cuenta: la luz azul se está yendo, los días ya se están acortando, el verano se ha ido. Este libro se titula Noches azules porque en la época en que lo empecé a escribir sorprendí a mi mente volviéndose cada vez más hacia la enfermedad, hacia la muerte de las promesas, el acortamiento de los días, lo inevitable del apagamiento, la muerte de la luz. Las noches azules son lo contrario de la muerte de la luz, pero al mismo tiempo son su premonición.
5. Escenas de ira, tristeza y desesperación con momentos felices de Ethel Krauze
Antonia es una mujer que intenta encontrar un modo de lidiar con la incertidumbre y el dolor que de pronto irrumpen en su vida. La ruta de su aprendizaje transita por la tristeza, la ira y la desesperación. Un libro que te enseñará que quizá el bienestar y la desdicha están más en el individuo que en el entorno y que todo depende de nuestra capacidad de respuesta frente al mundo. Porque la tristeza es inevitable, pero puede hacerse menos si miramos los momentos de felicidad.
6. Así es como la pierdes de Junot Diaz
Un libro sobre la vida misma y sobre su necesidad de reír, amar o llorar. Un libro sobre mujeres que quitan el sentido, y sobre el amor y el ardor. Y sobre la traición, porque a veces traicionamos lo que más queremos. Sobre los ruegos, las lágrimas, la sensación de estar atravesando un campo de minas para intentar recuperar lo que perdimos. En estos cuentos Junot Díaz nos recuerda que el ardor siempre triunfa sobre la experiencia, y que el amor, cuando llega de verdad, necesita más de una vida para desvanecerse.
7. La nieta del señor Linh de Philipe Claudel
En este libro, Philippe Claudel narra la historia del señor Linh, quien huye de una guerra que ha acabado con su familia y destrozado su aldea. La guerra le ha robado todo menos a su nieta, Sang Diu, que en su idioma significa «Mañana dulce». El señor Linh sólo se preocupa por su nieta, su única razón de existir hasta que conoce al señor Bark, un hombre robusto y afable cuya mujer ha fallecido recientemente. Un afecto espontáneo surge entre estos dos solitarios que hablan distintas lenguas, pero que son capaces de comprenderse en silencio y a través de pequeños gestos.
8. Depresión, la noche más oscura de Jesús Ramírez-Bermúdez
Este libro, aunque no es de tristeza, te ayudará a entender mejor la depresión. Si alguna vez has sentido una profunda tristeza, mezclada con miedo y dolor emocional, que te roba la energía, el sueño y la concentración y parece que la felicidad está prohibida y que no hay rutas para seguir, este libro es para ti. Porque la ciencia sabe que hay vías para salir adelante, desde la psicoterapia y el deporte hasta los medicamentos, hay opciones cuya efectividad es analizada con rigor en esta obra. La psiquiatría clínica, las neurociencias, la psicología y la investigación social tienen mucho que decir.
9. Suicido de Arnoldo Kraus
Por último, y porque hablar de la salud mental es esencial, queremos recomendarte Suicidio, un libro coordinado por Arnoldo Kraus, que reúne a algunas de las voces más relevantes del panorama científico, intelectual y literario de nuestro país para hablar sobre el fenómeno del suicidio sin mitos ni prejuicios. De acuerdo con datos de la OMS, el suicidio es la segunda causa de defunción entre las personas jóvenes (aproximadamente 800 000 muertes al año a nivel mundial), lo cual lo convierte en uno de los problemas de salud mental más preocupantes del presente, y más aún en la creciente desigualdad económica y social, así como a la depresión debida a la pandemia por Covid-19. Normalicemos no estar bien y pedir ayuda.